miércoles, 28 de abril de 2010
Sobre héroes y tumbas
Alejandra nos envía esto para compartir, del gran Ernesto Sábato.
Quería compartir uno de los tantos fragmentos que amo de Sobre Héroes y Tumbas:
"Aquel primer encuentro fue decisivo para Martín. Hasta ese momento, las mujeres eran o esas vírgenes puras y heroicas de las leyendas, o seres superficiales y frívolos, chismosos y sucios, ególatras y charlatanes, pérfidos y materialistas (“como la propia madre de Martín”, pensó Bruno que Martín pensaba). Y de pronto se encontraba con una mujer que no encajaba en ninguno de esos dos moldes, moldes que hasta ese encuentro él había creído que eran los únicos. Durante mucho tiempo le angustió esa novedad, ese inesperado género de mujer que, por un lado, parecía poseer algunas de las virtudes de aquel modelo heroico que tanto le había apasionado en sus lecturas adolescentes, y, por otro lado, revelaba esa sensualidad que él creía propia de la clase que execraba. Y aún entonces, ya muerta Alejandra, y después de haber mantenido con ella una relación tan intensa, no alcanzaba a ver con claridad en aquel gran enigma; y se solía preguntar qué habría hecho en aquel segundo encuentro si hubiera adivinado que ella era lo que luego los acontecimientos revelaron. ¿Habría huido?
Bruno lo miró en silencio: “Sí, ¿qué habría hecho?” Martín lo miró a su vez con concentrada atención y después de unos segundos, dijo:
—Sufrí con ella tanto que muchas veces estuve al borde del suicidio.
“Y, no obstante, aun así, aun sabiendo de antemano todo lo que luego me sucedió, habría corrido a su lado.”
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3 comentarios:
Me acuerdo de cuando leímos este libro en la facultad, y me acuerdo haberlo odiado al principio, no podía arrancar! y después me atrapó de una forma muy loca...
Me compré una copia usada, que a la mitad de todo le faltaba un capítulo o unas páginas y luego compré otro para poder terminar de leerlo jejeje.. good times...
Alejandra era todo un asunto... la profesora nos dijo que tal era así que hubo una oleada de niñas de nombre Alejandra en Argentina para esa época... y nuestra Alejandra (Yotti) dijo, cuando le preguntó esta profesora por el origen de su nombre, que le habían puesto Alejandra porque querían que tuviera un nombre largo, pero que igualmente todo el mundo le decía Ale.....
No sé que tanto tenga que ver esto con el fragmento pero me acordé y se los cuento ajajajaja
Wow! Good stuff!!!!
Cuando estaba terminando la secundaria, mi profesora de Literatura me prestó un libro de Sábato -que empecé a leer sólo porque en aquella época me sobraba el tiempo :p-. La cuestión es que para el final del trimestre, ya había terminado de leer 4 de sus libros, y le pedía más y más a mi profesora.
Hoy en día ya no me enamora como antes, aunque leo lo que compartís en el blog, y todavía hay algunas mariposas en el estómago :D
¡Gracias!
Wife, creo que ese es un buen tema para conversar, el efecto que causan determinados textos en determinados momentos de la vida, que no es necesariamente el efecto que nos va a seguir causando siempre....
Yo noto por ejemplo que mis compañeras de facultad quedamos obses con varios autores por ejemplo Borges, despues de haberlos estudiado tanto en la facultad, tal vez en otro momento de mi vida no me habría impactado, o tal vez si no lo hubiera leído en la facultad mi gusto en cuanto a lecturas sería totalmente distinto... ni mejor ni peor supongo, pero creo que lo que uno lee en determinados momentos de alguna forma define lo que vamos a seguir leyendo luego, o no....
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